Según el Diccionario Enciclopédico de Ciencias de la Salud Taber, es "inflamación del hígado generalmente causada por la exposición a lo siguiente:
• Un agente infeccioso (por ejemplo, un virus de la hepatitis).
• Una toxina (alcohol).
• Un medicamento (como paracetamol).
La enfermedad puede ser crónica o aguda, leve o mortal. Los casos crónicos solo se detectan al encontrar una alta concentración de enzimas hepáticas en la sangre; Los casos agudos, por otro lado, se caracterizan por ictericia, hepatomegalia y, en ocasiones, hemorragia, alteración del estado mental y fallo de múltiples órganos y sistemas. "
Básicamente, y en definitiva, la hepatitis es una "hinchazón", una especie de "irritación" del hígado que impide que este órgano funcione correctamente.
¿QUÉ CAUSA LA HEPATITIS?
Por lo general, la hepatitis suele estar asociada con una infección viral. Pero la realidad es que los factores que lo generan pueden ser otros, entre los que también destacan:
• Daño hepático causado por alcoholismo u otras sustancias tóxicas.
• Causas derivadas del uso excesivo o sobredosis de drogas.
En general, podemos distinguir dos tipos de hepatitis:
Agudo: con el tratamiento y la atención adecuados, puede desaparecer.
Crónico: su curso puede conducir, con el tiempo, a insuficiencia hepática, cáncer de hígado o cirrosis (destrucción de las células hepáticas).
Hepatitis A, B, C, D y E
Existen varios virus que pueden causar una inflamación aguda del hígado. Entre estos virus, por el momento, se conocen cinco tipos: A, C, D y E, que son del tipo ARN, y el virus B, que es ADN.
Virus A (VHA): Se transmite por vía fecal-oral a través de agua, alimentos o alimentos o artículos de aseo contaminados, provocando una afección aguda que nunca se vuelve crónica. El período de incubación se estima entre quince y cincuenta días. Es, por su modo de contagio, una enfermedad benigna del agua, con especial prevalencia en niños y adolescentes, que en muchos casos adquiere una connotación epidémica.
Virus B (VHB): la transmisión de este virus se produce por vía parenteral a través de sangre y hemoderivados (jeringas, agujas, tubos, catéteres, catéteres, etc. contaminados), así como a través de las secreciones genitales (principalmente semen ). Se estima que el período de incubación es de 50 a 160 días, que es mucho tiempo como portador sano. También hay transmisión vertical de madre a hijo. El contagio por contacto sexual también lo convierte en una enfermedad venérea. Los patrones de propagación son tan similares a los del VIH que en un momento fue acusado de ser un agente causal. Por su modo de transmisión, tiene especial relevancia a nivel hospitalario (en el que existen grupos de personas especialmente en riesgo para su trabajo en especialidades como hemodiálisis, laboratorio, urgencias, etc.…, que se recomiendan habitualmente para la vacunación).
Virus C (VHC): el período de incubación es de dos semanas a seis meses. Es una infección que puede permanecer asintomática hasta estadios avanzados, la destrucción del hígado ocurre lentamente y, en ocasiones, los síntomas no aparecen hasta 20 años después de la infección, por lo que la mayoría de los pacientes infectados no sospecha su infección. Su transmisión se produce durante transfusiones de sangre (actualmente poco frecuentes), uso de drogas inyectables, reutilización inadecuada o esterilización de equipos médicos (en particular jeringas y agujas) en establecimientos de salud, accidentes biológicos (en particular por agujas utilizadas en de pacientes infectados), piercings de tatuajes si no se toman las medidas de higiene adecuadas, tanto sexual como materna y fetal.